sábado, 16 de abril de 2011

CONSIDERACIONES POSIBLES

Salgo al alba
en deseos inquisidores
esperando
sirenas del sótano
en mis pliegues,
olvidadas páginas.

¿Quién eres, pequeña sombra
que olvidas contornos, nombres
enredados en salinas de penumbra?

Como un látigo,
vuelve mi ignorancia
a desafiarme,
el verdadero mar,
golpea
con su aldabón azul,
mis paralelos renglones,
infinitamente desterrados.

Tanteando en el amor,
a ciegas con la luz,
entre ramas maduras,
alguna estrella
explota
en palpitaciones
de constelaciones tardías.

Esta mañana,
no tenemos edad,
ciegamente,
nos recostamos,
ascendidos
a comarcas venturosas
cayendo de tu pelo.

¿Quién te encarcela, dime?
Di, ¿quién recuerda tu pasado?

Tal vez,
una canción
te libre
bajo alamedas
transmarinas.

Quiero que recuerdes:
no por claro
u oscuro,
ella te ama.

2 comentarios:

  1. TREMENDA, ADULTA, MADURA, MARAVILLOSA FORMA LA SUYA DE TRASMITIRSE. UN GUSTO VISITAR SU ESPACIO.
    UN ABRAZO

    ResponderEliminar
  2. RELTIH,un gusto que pases por mis páginas.
    Un abrazo

    ResponderEliminar