jueves, 9 de junio de 2011

TUS PIERNAS AL VIENTO

¿Quién no se ha demorado
en tus piernas al viento?

Mientras la realidad
sienta oleadas de tiempo
en mis rodillas,
engarzo
lentas piezas
y el cóncavo
cristal de tu universo.

Los ciclos se distraen
y, a punto de caer,
se arremolinan
en mi voz,
cuyo anfiteatro
es un juego sin bisutería.

Ébano inverso
de céfiro encarnizado
donde mi trama comienza.

Rostros vislumbrados
en rendido amor,
evocan jazmines,
vagas memorias.

Simulacros de dioses menores
prodigan libros infinitos,
como manuscritos
de páginas arbitrarias,
mezclan sonetos
con versos libres.

Acostumbrado a tus devaneos,
espero una palabra
dejada
como al descuido en una frase.

Recorridos marítimos,
largamente desviados
en generaciones futuras,
anhelan
un planeta acústico.

Tus piernas al viento:
sonidos de un oleaje
que se desvanece
en alegorías
y cantos del poniente,
entre los pliegues
de la tierra.