Cae la lluvia en Madrid,
envuelta en música y luz.
Tiovivo de olores,
repiquetea la ciudad
donde, invisible,
me veo
en hojarasca
de sonidos escritos,
en el vaiven farfullante,
donde sueño mis huesos
anudados a un tambor
de calabazas secas,
partidas al sol.
No huyo. Es el estío:
apenas, frases melancólicas
en lechos silvestres.
Es la lluvia mediterránea:
intensa y ocasional,
inunda y asfixia
cuando cae el relámpago.
Entonces,
canto frases ininteligibles
que el amor descifra.
En la fascinación
de abandonos súbitos
y restos de estaciones marinas,
preferidas
en juegos de memorias,
recojo despojos de tormentas.
Desnudo entre verdugos,
incinero el corazón de la noche
y, también, el rumor de espíritus sofocados
en la negra sangre del reloj
pulsando la mano del exilio.
Amante empecinado,
escucho la vehemencia
de rostros que olvidé
en columnas de ráfagas,
frases de arena,
mientras retomo
una lentitud en espejo
que agito,
para despertar terráqueos.
las frase melancólicas en hechos silvestres, icinerar el corazón, donde hay relojes que sangran.los ojos de los amantes empecinados retornan tal vez en las ráfagas lentas de un espejo que agitas. bellas imágenes,casi oníricas. cariños
ResponderEliminarquerido amigo Jaime,tengo que tener la voluntad de "resistir" tanta mediocridad, e insultos...me cansa mucho,se lleva mucha energía, pero se ,tambien.,que ese decir,y analizar mi PERSONA, en 2 minutos de lectura,podrá llamarlo "transferencia", si quiero analizarlo....pero a simple vista es basura, odio, envidia,feo muy feo...por suerte estoy en calma,conmigo, y mi blog,en tanto no pasen por él...
ResponderEliminarme gusta el poema, que leí!,y mucho
gracias
lidia-la escriba insolente?
claudia,gracias por comentar y reconocer el espejo, que dices, que agito.
ResponderEliminarun cariño
lidia, me alegra que te haya gustado el poema.
ResponderEliminarun saludo